Llevo unos cuantos días sin hablaros...
Me salió casi de imprevisto la opción de pasar en Granada un finde largo, y así lo hice. Volví el domingo noche de una ciudad que, me atrevo a decirlo, me ha atrapado.
Dejando atrás el Albaycín y tras un paseo por el barrio del Sacromonte, llegamos a la casa de Pepe, que tiene montada una barra de bar y un par de mesitas. Las vistas desde allí son impresionantes, evitando además el bullicio del Albaycín (sobretodo el fin de semana)
También aproveché para visitar Pampaneira y Capileira, dos pueblecitos de montaña de La Alpujarra. Pero eso de momento me lo reservo para mí, tal vez le llegue su hora en otra entrada ;)
6 comentarios:
Adoro Granada... de una visita me quedé totalmente prendado!
A ver cuando puedo volver yo por allí...
de improviso una visita larga..jumm, que raro suena eso...
ayer estuve yo por alli pasando la tarde por cierto...;)
Deduzco que cuando dices por allí te refieres a Granada ;)
Raro? Y qué es normal para ti? :P
Deduces bien...hoy en día hay tan pocas cosas normales...:P
Sí, me refería a Granada... para otros sitios lo habría dicho de otro modo ^^
Este Milhaud...
Ya sé que tú te referías a Granada, si te fijas un poquito más verás que la pregunta la responde FBlack más arriba ;)
Publicar un comentario